02-17-2004, 01:59 PM
Cd. de México (5 febrero 2004).- México se encuentra a la cola de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) en materia de ciencia y tecnología, de acuerdo a sus más reciente informe Main Science and Technology Indicators, publicadas la semana pasada.
Si bien desde que el País ingresó a este organismo multinacional en mayo de 1994 ocupó inmediatamente las últimas posiciones, en muchos aspectos alternaba la posición del fondo con países como Grecia y Turquía, pero ahora, a diez años de su incursión, la novena economía del mundo ocupa el último lugar de los 30 países miembros en casi todos los rubros.
Actividades como el monto del Producto Interno Bruto (PIB) destinado al sector, el número de investigadores por cada cien mil habitantes, los recursos destinados a ciencia básica, y la inversión del sector privado, entre otros que son fundamentales para el desarrollo científico, ubican al País al final de la tabla.
"México debe entender que la prioridad más importante para el desarrollo es la educación, la ciencia y la tecnología", afirmó Daniel Malkin, jefe de la División de Políticas en Ciencia y Tecnología de la OCDE. "La investigación y el conocimiento son el factor más importante de la producción".
De acuerdo con las estadísticas, México se encuentra en el último lugar en cuanto al número de patentes, pues durante el 2000 sólo se obtuvieron 5 registros en el sector industrial y uno en el biotecnológico.
"Siempre estamos en primer lugar del abismo en comparación con los países del Primer Mundo", afirmó René Drucker, coordinador de la Investigación Científica de la UNAM. "Es la misma historia de siempre año con año. Desde hace 20 años hemos estado esperando que esta situación cambie y nunca cambia, nunca hay dinero".
El investigador señaló que la ciencia es cara, pero si no se destinan más recursos a esta actividad estratégica nunca saldremos del subdesarrollo. "Desde luego se requieren recursos, pero también una planeación de 10 años en el futuro, con un financiamiento que vaya incrementándose paulatinamente", dijo.
En el número de investigadores por cada mil empleos, México tiene el lugar número 30 con un sólo científico, mientras que China - que, aunque no es miembro de la OCDE es el principal competidor del País-- tiene 1.1 científicos, cifra muy alta si se considera que cuenta con mil 300 millones de habitantes.
En tanto, el monto del PIB dedicado a ciencia, México tiene el lugar número 30 pues sólo dedica el 0.4 por ciento a este sector, mientras que el promedio de la OCDE es de 2.3 por ciento. Esta cifra está muy lejos del 4.3 por ciento de Suecia o del 1.29 por ciento de China.
"Nuestros gobiernos tienen muchos años diciendo que pronto alcanzaremos el 1 por ciento del PIB en ciencia y tecnología pero eso nunca sucede", subrayó Ana María Cetto, directora general adjunta del Organismo Internacional de Energía Atómica, con sede en Viena.
La investigadora mencionó que el problema principal es el escaso presupuesto, pero tampoco existe un plan de desarrollo propio de las ciencia básica y no se han creado nuevas instituciones para hacer investigación.
"Necesitamos aprovechar urgentemente a los grupos que hay en México que se están yendo del País buscando trabajo", resaltó Cetto.
En cuanto a la inversión que realiza la iniciativa privada, el País ocupa lugar número 29, pues según la OCDE el 20 por ciento de los recursos totales provienen del sector productivo.
Mientras, Jaime Parada, director general del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, ha argumentado en varias ocasiones que la cantidad de recursos que el Gobierno federal destina al sector está sujeto a la escasez de dinero vía recaudación fiscal.
Sin embargo, para los investigadores entrevistados se trata de voluntad de lo políticos y la falta de compromiso social de los científicos.
"En el ámbito científico hay pocas voces independientes; muchos están mediatizados y no piensan por su cuenta", mencionó Cetto. "No dicen las cosas claramente, no las ven o no las quieren ver, y no se vinculan con los problemas del País y se dedican únicamente a lo suyo, porque así se les evalúa".
Salu2
Si bien desde que el País ingresó a este organismo multinacional en mayo de 1994 ocupó inmediatamente las últimas posiciones, en muchos aspectos alternaba la posición del fondo con países como Grecia y Turquía, pero ahora, a diez años de su incursión, la novena economía del mundo ocupa el último lugar de los 30 países miembros en casi todos los rubros.
Actividades como el monto del Producto Interno Bruto (PIB) destinado al sector, el número de investigadores por cada cien mil habitantes, los recursos destinados a ciencia básica, y la inversión del sector privado, entre otros que son fundamentales para el desarrollo científico, ubican al País al final de la tabla.
"México debe entender que la prioridad más importante para el desarrollo es la educación, la ciencia y la tecnología", afirmó Daniel Malkin, jefe de la División de Políticas en Ciencia y Tecnología de la OCDE. "La investigación y el conocimiento son el factor más importante de la producción".
De acuerdo con las estadísticas, México se encuentra en el último lugar en cuanto al número de patentes, pues durante el 2000 sólo se obtuvieron 5 registros en el sector industrial y uno en el biotecnológico.
"Siempre estamos en primer lugar del abismo en comparación con los países del Primer Mundo", afirmó René Drucker, coordinador de la Investigación Científica de la UNAM. "Es la misma historia de siempre año con año. Desde hace 20 años hemos estado esperando que esta situación cambie y nunca cambia, nunca hay dinero".
El investigador señaló que la ciencia es cara, pero si no se destinan más recursos a esta actividad estratégica nunca saldremos del subdesarrollo. "Desde luego se requieren recursos, pero también una planeación de 10 años en el futuro, con un financiamiento que vaya incrementándose paulatinamente", dijo.
En el número de investigadores por cada mil empleos, México tiene el lugar número 30 con un sólo científico, mientras que China - que, aunque no es miembro de la OCDE es el principal competidor del País-- tiene 1.1 científicos, cifra muy alta si se considera que cuenta con mil 300 millones de habitantes.
En tanto, el monto del PIB dedicado a ciencia, México tiene el lugar número 30 pues sólo dedica el 0.4 por ciento a este sector, mientras que el promedio de la OCDE es de 2.3 por ciento. Esta cifra está muy lejos del 4.3 por ciento de Suecia o del 1.29 por ciento de China.
"Nuestros gobiernos tienen muchos años diciendo que pronto alcanzaremos el 1 por ciento del PIB en ciencia y tecnología pero eso nunca sucede", subrayó Ana María Cetto, directora general adjunta del Organismo Internacional de Energía Atómica, con sede en Viena.
La investigadora mencionó que el problema principal es el escaso presupuesto, pero tampoco existe un plan de desarrollo propio de las ciencia básica y no se han creado nuevas instituciones para hacer investigación.
"Necesitamos aprovechar urgentemente a los grupos que hay en México que se están yendo del País buscando trabajo", resaltó Cetto.
En cuanto a la inversión que realiza la iniciativa privada, el País ocupa lugar número 29, pues según la OCDE el 20 por ciento de los recursos totales provienen del sector productivo.
Mientras, Jaime Parada, director general del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, ha argumentado en varias ocasiones que la cantidad de recursos que el Gobierno federal destina al sector está sujeto a la escasez de dinero vía recaudación fiscal.
Sin embargo, para los investigadores entrevistados se trata de voluntad de lo políticos y la falta de compromiso social de los científicos.
"En el ámbito científico hay pocas voces independientes; muchos están mediatizados y no piensan por su cuenta", mencionó Cetto. "No dicen las cosas claramente, no las ven o no las quieren ver, y no se vinculan con los problemas del País y se dedican únicamente a lo suyo, porque así se les evalúa".
Salu2
Cinescape, Imperator in Aeternum
Tengo una vaca lechera, no es una vaca cualquiera,
Me da leche condensada, hay que vaca tan salada,
Tolón, tolón, tolón, tolón
Tengo una vaca lechera, no es una vaca cualquiera,
Me da leche condensada, hay que vaca tan salada,
Tolón, tolón, tolón, tolón