12-02-2005, 11:28 AM
Entrecruzamientos I
Leonardo da Jandra
"...
- En México, el problema racial es una herida supurante que sólo podría cicratizarse con el advenimiento de una revolución cultural que enraíce al presente en la tierra fértil del esplendoroso pasado. Mientras ello no suceda, continuaremos asumiendo la hipócrita actitud ambivalente que nos hace ensalzar lo autóctono ante lo foráneo y denigrar a la indianidad ante nosotros mismos... Sin embrago,... creo poder afirmar que lo que llaman hombre de razón no sólo continúa subyugando y explotando al indio, sino que, y esto es lo más grave, ha logrado también, mediante una psicología comercial tendenciosa y etnocida, que el indio reniegue de si mismo y vea a los suyos y a su tradición como algo bajo, rastrero y de lo que hay que procurar alejarse a como dé lugar y cuanto antes...
- ...Como ya bien señalé, a mi no me importa lo más mínimo el hombre blanco, el burgues, el indio, el gringo, el ruso, o cualquier otra representación carente de vida propia. Yo trato con seres individuales, diversos, únicos, irrepetibles. Y dentro de esta pequeña fracción de individuos que me es dado conocer, los hay de gran nobleza y del más bajo servilismo, sinceros y mentirosos, egocéntricos y comunitarios. Pero jamás, oígalo bien, jamás he podido comprobar que todos los nobles, sinceros y comunitarios, conformen un mundo genérico y partidista en oposición a los serviles, egocéntricos y mentirosos. No existe en la contundencia de los hechos diarios tal maniqueísmo. Hay grandes hombres burgueses, como hay grandes hombres proletarios; y lo mismo cabría decir de los indios y de los estupidamente llamados hombres de razón. Por otro lado, no creo que haya escapado a su capacidad de observación la cantidad de hijos de la chingada, como dicen aqui en México, que encuentra uno por estos lugares tan nutridos de gente desposeída y explotada. Y, ya para concluir, ... le diré que el eje referencial de mi existencia es, por usar una expresión grata a los antiguos pobladores del Anáhuac, FORJAR UN ROSTRO REFULGENTE Y UN CORAZÓN JADEÍTICO. Y dudo mucho que esto pudiera lograrlo en una forma de sociedad, de ésas tan cacareadas, donde para ir al baño hay que pedir autorización."
Y del mismo libro.
"¿Es acaso verdad que se vive en la tierra?
No para siempre en la tierra: tan solo un breve instante
Si es esmeralda, se rompe,
si oro, se quiebra,
si pluma de quetzal, se rasga.
¡No para siempre en la tierra: tan sólo un breve instante!
- Cantares Mexicanos"
Leonardo da Jandra
"...
- En México, el problema racial es una herida supurante que sólo podría cicratizarse con el advenimiento de una revolución cultural que enraíce al presente en la tierra fértil del esplendoroso pasado. Mientras ello no suceda, continuaremos asumiendo la hipócrita actitud ambivalente que nos hace ensalzar lo autóctono ante lo foráneo y denigrar a la indianidad ante nosotros mismos... Sin embrago,... creo poder afirmar que lo que llaman hombre de razón no sólo continúa subyugando y explotando al indio, sino que, y esto es lo más grave, ha logrado también, mediante una psicología comercial tendenciosa y etnocida, que el indio reniegue de si mismo y vea a los suyos y a su tradición como algo bajo, rastrero y de lo que hay que procurar alejarse a como dé lugar y cuanto antes...
- ...Como ya bien señalé, a mi no me importa lo más mínimo el hombre blanco, el burgues, el indio, el gringo, el ruso, o cualquier otra representación carente de vida propia. Yo trato con seres individuales, diversos, únicos, irrepetibles. Y dentro de esta pequeña fracción de individuos que me es dado conocer, los hay de gran nobleza y del más bajo servilismo, sinceros y mentirosos, egocéntricos y comunitarios. Pero jamás, oígalo bien, jamás he podido comprobar que todos los nobles, sinceros y comunitarios, conformen un mundo genérico y partidista en oposición a los serviles, egocéntricos y mentirosos. No existe en la contundencia de los hechos diarios tal maniqueísmo. Hay grandes hombres burgueses, como hay grandes hombres proletarios; y lo mismo cabría decir de los indios y de los estupidamente llamados hombres de razón. Por otro lado, no creo que haya escapado a su capacidad de observación la cantidad de hijos de la chingada, como dicen aqui en México, que encuentra uno por estos lugares tan nutridos de gente desposeída y explotada. Y, ya para concluir, ... le diré que el eje referencial de mi existencia es, por usar una expresión grata a los antiguos pobladores del Anáhuac, FORJAR UN ROSTRO REFULGENTE Y UN CORAZÓN JADEÍTICO. Y dudo mucho que esto pudiera lograrlo en una forma de sociedad, de ésas tan cacareadas, donde para ir al baño hay que pedir autorización."
Y del mismo libro.
"¿Es acaso verdad que se vive en la tierra?
No para siempre en la tierra: tan solo un breve instante
Si es esmeralda, se rompe,
si oro, se quiebra,
si pluma de quetzal, se rasga.
¡No para siempre en la tierra: tan sólo un breve instante!
- Cantares Mexicanos"