06-20-2007, 05:15 PM
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La semana pasada, en una tienda de Texas, me estaba probando unos lentes, los últimos que me probé me gustaron y sólo me los subí... claro que con la madre esa de sensor de metal en la etiqueta y con otra de cartón lo suficientemente grande como para ser vista a distancia.
La cosa es que se me olvidó que los traía en la cabeza porque seguí viendo ropa. Llego a la caja y nada, la etiqueta estaba grande, pero la cajera no alcanzó a verla...
Cruzamos la puerta -iba con una hermana- y empieza a sonar la alarma horrible; corre un guardia con un radio en la mano gritándome que me parara... que tenía que pagar el artículo que llevaba y subir un momento a la gerencia... puta madre, ya me veía fichada en esa tienda; ya veía mi foto en la entrada... ... ...
Mi hermana -lindísima como es ella- se alejó de mí advirtiéndome: "vienes sola", y no se aguantaba la risa la cabrona hasta que se empezó a carcajear cuando estaba tratando de explicarle al guardia... lo bueno es que su risa contagió al guardia y como que entendió que se había tratado de algo involuntario y aceptó que sólo pagara -o regresara- la prenda y me fuera.
Qué feo se siente...
Saludos!
La semana pasada, en una tienda de Texas, me estaba probando unos lentes, los últimos que me probé me gustaron y sólo me los subí... claro que con la madre esa de sensor de metal en la etiqueta y con otra de cartón lo suficientemente grande como para ser vista a distancia.
La cosa es que se me olvidó que los traía en la cabeza porque seguí viendo ropa. Llego a la caja y nada, la etiqueta estaba grande, pero la cajera no alcanzó a verla...
Cruzamos la puerta -iba con una hermana- y empieza a sonar la alarma horrible; corre un guardia con un radio en la mano gritándome que me parara... que tenía que pagar el artículo que llevaba y subir un momento a la gerencia... puta madre, ya me veía fichada en esa tienda; ya veía mi foto en la entrada... ... ...
Mi hermana -lindísima como es ella- se alejó de mí advirtiéndome: "vienes sola", y no se aguantaba la risa la cabrona hasta que se empezó a carcajear cuando estaba tratando de explicarle al guardia... lo bueno es que su risa contagió al guardia y como que entendió que se había tratado de algo involuntario y aceptó que sólo pagara -o regresara- la prenda y me fuera.
Qué feo se siente...
Saludos!
"Tengo una imagen, luego soy", Abbas Kiarostami.